Tengo una vivienda en alquiler desde el año 1978. Se me ha estropeado la calefacción de carbón y tengo que sustituirla. Me han presupuestado el cambio en alrededor de los 1.800 euros y no puedo hacer frente a ellos. ¿Este arreglo lo tengo que soportar yo o lo tiene que soportar el arrendador?
La calefacción es un servicio imprescindible hoy en día, máxime si en la localidad donde Vd. vive hace frío en invierno. Por lo tanto su reparación o sustitución es necesaria para mantener la vivienda en condiciones adecuadas de habitabilidad y en consecuencia deberá ser el arrendador quien asuma el coste de la reparación.
A su vez el arrendador, si se cumplen una serie de requisitos, puede luego elevar la renta por razón de dichas obras de reparación.