TEMA:

buenas,pues la situacion es la siguiente.mi novia lleva año y medio de alquiler con una amiga,al irse la amiga yo me he mudado con ella.hace algunos meses la lavadora empezo a fallar no cogiendo los liquidos de lavado,avisamos a la casera y vino su hermano que no tenia pinta de entender mucho y al intentar levantar la tapa,esta crujio y ya no cierra,pero bueno,ahora lo que no coge es el agua,y tenemos que meter manualmente de 5 a 7 botellas para que coja algo.cuando se lo volvimos a comentar dijo que eso no es responsabilidad suya,que debido a su uso se ha estropeado y nos corresponde.un tecnico nos comento que con lo vieja que esta(10 años minimo),es mejor comprar otra que arreglarla.
mi pregunta es,realmente es competencia suya verdad??y si es asi,como puedo obligarla a repararla.gracias.espero respuestas rapidas ya que he quedado mañana con ella para tratar el tema.gracias de antemano

La necesidad de realizar reparaciones de electrodomésticos son siempre fuente de conflictos en los alquileres de vivienda pues para el arrendador siempre serán debidas al mal uso y para el inquilino debidas a la antiguedad.

Ninguno de los dos está equivocado. Si la necesidad de reparación/sustitución es debida al mal uso, quien debe reparar es el inquilino. Si es debido al agotamiento del periodo de vida útll del electrodoméstico en cuestión, es responsabilidad del arrendador.

El problema, lógicamente, es dilucidar cuál es la causa por la que es necesario acometer la reparación, y acreditarlo debidamente.

La manera más económica es recabar de un técnico -oficial de la empresa fabricante a ser posible- un informe o nota o presupuesto en el que se recoja su opinión al respecto.

Naturalmente si el conflicto se ha transformado en algo personal -lo cual sucede más veces de lo que se pueda uno imaginar- cabe recurrir a cualquier perito especializado en la materia. Pero a la postre resultará más caro el collar que el perro.

Sólo en base a la opinión autorizada de un tercero, a ser posible experto en la materia, se puede resolver este tipo de conflictos.

En ausencia de PRUEBA de la causa quien tiene la posición más ventajosa es el arrendador, que se habrá preocupado de hacer constar en el contrato que la vivienda y todo el mobiliario y enseres que contiene se entregan en perfecto estado de conservación o incluso nuevo. Esto traslada al inquilino la carga de probar que la causa de la necesidad de reparaciones. Si no lo hace, se presume que es debido al uso y que por lo tanto corre de su cuenta.