Cuando un vecino no se comporta civilizadamente, como es el caso, es la comunidad la que debe emprender medidas. Concretamente el Presidente, que debe pedir a ese vecino que cese en su conducta. Si el vecino no cesa, la comunidad puede presentar una demanda judicial para que se condene a dicho vecino a no hacer lo que venía haciendo. Si lo incumple puede verse incluso expulsado de la vivienda. Y si sigue sin cumplir desobedeciendo una sentencia, puede cometer un delito.
La peculiaridad de su caso es que no puede esperar ayuda del Presidente de su Comunidad, ni siquiera de su comunidad, porque todas son la misma persona, y además con intereses contrarios a los suyos, ya que el vecino que causa las molestias es su inquilino.
Lo que debe hacer es lo siguiente:
-Pedir al Presidente de la Comunidad, por escrito, que convoque una Junta Extraordinaria de Propietarios para tratar del problema de los perros. Aunque la formen sólo Vds. dos, debe hacerlo. Si no convoca la Junta, entonces Vd. estaría legitimada para tomar medidas en nombre de la comunidad, en interés de la misma.
Entre esas medidas estarían las que debió hacer adoptado el Presidente, es decir, requerir al vecino para que cese en su actitud incivilizada, y, si no atiende al requerimiento, presentar una demanda para que sea condenado a hacerlo.
Pienso que para ese tipo de molestias es el camino a seguir.